PATRONATOS

Patronos

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LOS SAGRADOS CORAZONES DE JESÚS Y DE MARÍA

 

Porque nuestra Congregación nace en la atmósfera espiritual de esta devoción (Siglo XIX).

GIOVANNI ANTONIO FARINA

Nació en Gambellara el 11 de enero de 1803, en un pueblo tranquilo, asentado en las colinas de la Provincia de Vicenza en Italia. Sus padres fueron Francesca Belamme y Pietro Farina. A los tres años los padres lo confiaron al tío Sacerdote, Giovanni Antonio recibió del tío la primera instrucción. Él fue su maestro y guía.
Influyó profundamente en su formación.
1817, a los 14 años, Giovanni Antonio Farina, entra en el Seminario de Vicenza. Poco después, su madre queda ciega.
A los 21 años, Giovanni Antonio, perdió repentinamente a su Padre, único sustento de la familia, El joven seminarista supo aprovechar de estas dolorosas experiencias, que transformaron su corazón, haciéndolo siempre más sensible al amor de Dios y del prójimo.
Por su gran piedad y su empeño en los estudios, fue ordenado Sacerdote un año antes de lo normal el 14 de Enero de 1827.
El Obispo lo nombró Capellán de la parroquia de San Pietro, una de las más grandes y pobres de la ciudad de Vicenza.
Durante 12 años, el joven Sacerdote, se entregó con abnegación y celo apostólico a la atención espiritual y material de los más pobres.
Después de haber constatado la miseria y la pobreza moral en la que vivía tanta niñez, Giovanni Farina, aceptó con entusiasmo la dirección de la Pía Obra de Santa Dorotea dedicada a la educación cristiana y al cuidado de niñas pobres.
En la Parroquia existía también una escuela de caridad instituida por el Conde. Giovanni Farina aceptó también dirigir esta obra y al poco tiempo unió las dos y que pronto reorganizó en una sola obra.
En 1836 La obra ya daba frutos, aunque no estaba exenta de problemas.
El número de alumnas aumentaba, pero algunas maestras eran ineficientes.
Las dificultades y las amargas experiencias con maestras asalariadas, preocupaban al Farina, Pues quería dar a las niñas lo mejor, en lo que respecta a formación y educación. Después de tantas oraciones y sacrificios, tuvo una intuición profética: Encargar la educación de las niñas a maestras especializadas que compartieran “por Vocación” su ideal de educación en la fe y para la vida. Con este fin fundó la Congregación de las Madres Maestras de Santa Dorotea Hijas de los SS. Corazones El 11 de Noviembre de 1836.
El 4 de Marzo de 1888 Mons. Giovanni Antonio Farina, besó el Crucifijo que tenía entre las manos y entregó su alma a Dios.

El Papa, Juan Pablo II lo proclamó BEATO. En Roma el 4 de Noviembre del 2001.

SANTA DOROTEA

Fue una joven que nació en el siglo III en la ciudad de Capadocia en Grecia.
Se distinguió por su piedad, modestia, mortificación y entrega virginal a Cristo. Como cristiana católica fue irremovible logró convencer a dos jóvenes paganas al cristianismo, convirtió a aquel hombre que le quito la vida, mediante el cumplimiento de su deseo.

Fue martirizada en el año 304 y es honrada por el pueblo católico como: mártir, virgen y apóstol.

SANTA BERTILLA:
Nace en 1888, en Brendola, es la icona de la espiritualidad Dorotea. De su vida interior brotó su exquisita caridad que prodigó a los enfermos, a los médicos, a los superiores, a todos.
Se inmortalizó en el tiempo y el espacio, como ejemplo de santidad práctica y convincente para todo el que anhela la plenitud de su ser. Su lema fue: “A Dios toda la gloria, a mis hermanos toda la alegría y a mí todo el sacrificio”

El 11 de Mayo de 1961, el Papa Juan XXIII, proclamó Santa